¿Por qué este conflicto en mi corazón?


Siempre existe un conflicto en nuestros corazones, siempre existe un alucha entre el orgullo y la humildad, el odio y el amor, el perdón y el no querer perdonar, la verdad y la mentria, la apertura y la cerrazón. todos caminamos por la senda de la liberación hacia l aunidad interior y la sanación.

Cuando las barreras comienzan a caer, nuestro corazón se revela con toda su belleza y sufrimiento. El corazón, como consecuencia de las heridas y del pecado, está lleno de tinieblas y de la necesidad de vengarse, pero también es la morada de Dios: el templo del Espíritu. No debemos tener miedo de ese corazón vulnerable, atraído por la sexualidad, y capaz de albergar odio y envidias. No debemos buscar una evasión en el poder y el conocimiento, para encontrar nuestra propia gloria e independencia. Al contrario, tenemos que dejar que Dios ocupe su lugar, lo purifique e ilumine. A medida que la piedra de nuestra tumba se va corriendo, y nuestra misión revelando, descubrimos que somos amados y perdonados; entonces por el poder del amor y del Espíritu, el sepulcro se convierte en lugar de vida. El corazón revive en la pureza. Descubrimos, por la gracia de Dios, una vida nueva, nacida del Espíritu.

Este descenso a las profundidades del corazón es un túnel de sufrimietno pero también un aliberación de amor. Es doloroso cuando las barreras del egoísmo, de la necesidad de confirmarse y ser reconocido por su propia gloria, se mueven y caen. Es una liberación cuando el niño que está en nosotros renace y el adulto egoísta muere. Jesús dice que si no cambiamos y nos hacemos como niños, no entraremos en el Reino. La revelación del amor es para ellos, y no para los sabios e inteligentes de este mundo.

Cuando vivimos de verdad según nuestro corazón, vivimos según el Espíritu que habita en nosotros. Vemos a los otros como Dios los ve, vemos sus heridas y sus sufrimientos; pero no los consideramos un problema. Vemos a Dios en ellos. Pero cuando empezamos a vivir así, sin la protección de las barreras, nos volvemos muy vulnerables y pobres. «Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos.» Esta pobreza se transforma en nuestra riqueza, pues, a partir de ese momento, no vivimos ya por nuestra propia gloria, sino por el amor y el poder de Dios que se manifiesta en la debilidad.

(Jean Vanier, «La comunidad. Lugar del perdón y de la fiesta.», PPC 1998, p39-40)

1 comentario en “¿Por qué este conflicto en mi corazón?

  1. He buscado alguna publicación sobre la homosexualidad pero no encontré nada. Me gustaría trate sobre las personas que padecemos esas tentaciones y NO queremos sentirlas.
    Dios Trino y Uno le colme de bendiciones.
    Favor publicar pues puede ser de ayuda a muchos. Gracias por todo.

Deja un comentario